Hoy cuando iba hacia el trabajo me he encontrado con Irene, una clienta del estudio, y hemos estado hablando sobre mi vuelta al trabajo tras el parto y quería compartirlo también contigo.
En mi caso he vuelto antes de tiempo (a los dos meses de nacer) ya que siendo autónoma me veo en la necesidad de hacerlo así.
Y no te voy a mentir, no está siendo como esperaba. La lactancia materna exclusiva no es compatible con una (ni media) jornada laboral. Ni siquiera siendo yo mi propia jefa.
Creía que traerme al peque al estudio iba a ser coser y cantar. Spoiler: de momento no lo está siendo.
Porque a parte de físicamente, tengo que estar también mentalmente: pienso constantemente en crear nuevos decorados, estoy ahora diseñando la próxima campaña de Navidad, hablo con proveedores para encontrar los mejores productos para vosotros, mantengo activa y actualizada la página web, gestiono la contabilidad, planifico estrategias de mejora para ofrecer siempre lo mejor…
Toda esta parte que no se ve está yendo a velocidad x0,5
Solo os pido (y me pido) paciencia.
El estudio está dando un giro 360.
Septiembre, estamos ready.
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